Si estás pensando en usar un método diferente a las toallas higiénicas o a los tampones, la copa menstrual es una excelente opción. Sin embargo, puede que no la conozcas y mucho menos sepas cómo elegir la talla adecuada. En este artículo descubrirás los aspectos que debes tener en cuenta para escogerla y así pasarte a esta alternativa que generará un impacto positivo en tu cuerpo, tu bolsillo y el medio ambiente.
La copa menstrual es un producto de higiene femenina cómodo, seguro y eficaz. Aunque pareciera ser una nueva invención, lo cierto es que se inventó en 1930. Consiste en un recipiente fabricado 100 % con silicona médica que se introduce en la vagina para recoger el flujo menstrual. Su forma le permite adaptarse con facilidad a las paredes vaginales y permanecer inmóvil hasta por 12 horas.
Además de ser una alternativa ecológica a las toallas higiénicas y a los tampones (¿sabías que puede reutilizarse hasta por 10 años?), la copa se adapta al cuerpo de cada mujer y respeta su zona íntima. Quienes la han probado ya no eligen otro sistema, pues quedan encantadas por lo suave, flexible y duradera que es.
Aun así, hay mujeres que no se atreven a usarla porque temen elegir la talla de copa menstrual incorrecta. La duda aumenta cuando buscan en Internet y descubren que cada marca les ofrece entre 2 y 4 tamaños de copa. A continuación, te contamos qué aspectos debes considerar para encontrar la copa menstrual ideal.
Edad y partos vaginales
Por lo general, se recomienda una copa pequeña si eres menor de 30 años y no has tenido hijos por vía vaginal, y una copa grande si tienes de 30 años en adelante o has tenido un parto vaginal.
Altura del cérvix
También llamado cuello uterino, el cérvix es la parte inferior del útero. Está situado al fondo de la vagina; es como el «techo» del canal vaginal. Conocer la altura del cérvix te ayudará a elegir la talla de copa menstrual adecuada. Si la copa es muy alta, le hará presión al cérvix o terminará doblándose, lo que generará incomodidad y posiblemente derrames de sangre. Si la copa es muy baja, también puede haber derrames. Cuando eliges la copa correcta, esta no se siente. Puedes caminar, saltar, nadar o sentarte con tranquilidad.
En este punto, seguro te preguntarás cómo medir la altura de tu cérvix. Calma. Lo primero de todo es comprender que la copa menstrual está hecha no solo para cuidar del planeta, sino también para cuidar de ti y ayudar a que te conozcas mejor. Así que, para medir la altura del cérvix, debes saber que has de usar tus dedos. Es tu cuerpo, y nadie lo tratará con el mismo amor y cuidado que tú, así que no tengas miedo.
Lo ideal es medir la altura del cérvix días antes de la menstruación. Lávate muy bien las manos y elige el dedo más largo o con el que más habilidad tengas. Luego, hazte en una posición cómoda (recostada en tu cama, de cuclillas o sentada en el inodoro) e introduce el dedo en tu vagina hasta que llegues al fondo. Si sientes una pared dura y rígida, ¡ese es el cérvix! Proyecta una línea imaginaria en el dedo, justo donde inicia tu vagina, y después sácalo y mide cuántos centímetros hay entre la punta de tu dedo y aquella línea. Esa será la altura de tu cérvix. Si, en cambio, al hacer la exploración, no sentiste nada, no te preocupes: es porque tienes un canal vaginal profundo.
Ahora sí, con la altura del cérvix, tu edad y el número de partos vaginales que has tenido, estás lista para buscar y elegir la talla de copa menstrual adecuada para ti.