Un estudio publicado en Journal of the National Cancer explica las secuelas de la quimioterapia pueden perdurar hasta años después de finalizar el tratamiento, lo que afecta la calidad de vida del paciente.
Los procesos de quimioterapia perjudican el sistema nervioso y hacen que la persona pierda sensibilidad en sus manos y pies debido al adormecimiento de los nervios, además genera debilidad muscular, estreñimiento y mareos. La investigación indica que dichos síntomas pueden durar años después de finalizar el tratamiento, por lo que se aconseja apoyarse de alternativas que mejoren la calidad de vida del paciente.
Algunas opciones son:
- Mantener un buen estado de ánimo. Durante este proceso es vital contar con el apoyo de familiares y amigos. Es clave no sentirse solo, también existen grupos de pacientes con especialistas de apoyo cáncer y terapias con acompañamiento.
- Llevar una dieta balanceada. No debe faltar ningún nutriente en la dieta, además, realizar ejercicio físico, de acuerdo con la situación de cada individuo, ayuda que se concentre en otras tareas.
- Dosificar la energía. Al realizar cualquier tarea, descansar por 15 minutos. No esperar hasta sentirse agotado para detener lo que se está haciendo.
Le puede interesar: Una mirada más allá del cáncer.