La higiene y organización de los espacios que habita también influyen en su salud física y mental. Convertirlo en hábito es importante.
Asesores: Mónica González, organizadora profesional
Calixto Herrera, inmunólogo, adscrito a Coomeva Medicina Prepagada
Para prevenir contagios de covid-19 se promueven medidas como el lavado frecuente de manos, la limpieza y la desinfección de objetos y superficies. De esta manera, es notable una mayor preocupación generalizada por mantener la higiene; y productos como el alcohol, geles antibacteriales y soluciones para exteriores con hipoclorito de sodio o amonio cuaternario son cada vez más comunes en la cotidianidad.
Sin embargo, procurar la sanidad de los ambientes no debería ser un asunto de la pandemia, sino de hábitos permanentes, pues como lo explica el inmunólogo Calixto Herrera, “somos una maquinaria que está constantemente comunicándose con el medio interno y externo que tenemos”. Así mismo, el especialista recomienda equilibrar el proceso, es decir, tener espacios higiénicos pero a su vez no perder el contacto con lo natural.
Por su parte, con respecto a la armonía del hogar, la organizadora profesional Mónica González (en Instagram @laorganizer.medellin) explica que “la organización se hace una vez, es el sistema práctico para optimizar espacios y darle a cada cosa su lugar, ordenar es devolverlas a su sitio cuando se usan. Así se mantiene la organización”.
Aseo en la justa medida
Con la pandemia, al pasar más tiempo en las residencias, los casos de rinitis y asma han empeorado, señala el inmunólogo. Lo anterior debido a la presencia de ácaros, que son los principales alérgenos intradomiciliarios. “El sistema inmunológico de las personas susceptibles a desarrollar alergias detecta las proteínas de esos agentes microscópicos como si fueran invasores extraños, lo que genera inflamación en nariz, ojos, bronquios, piel, etc.”, explica Herrera. Por lo tanto, el especialista aconseja aspirar y trapear los pisos en vez de barrer; y limpiar con trapo húmedo en lugar de sacudir. Igualmente, evitar la acumulación de polvo, lavar sábanas y cobijas cada ocho días, preferir almohadas que no sean de plumas ni cobijas de lana de oveja, la queratina de estas es el alimento de los ácaros.
Contrario a lo que podría pensarse, los entornos excesivamente pulcros están asociados con más alergias, lo mismo el exagerado lavado de manos. “Cuando se altera la ecología de la piel y su flora normal, con jabones antibacteriales por ejemplo, el sistema inmune queda propenso a otro tipo de infecciones como irritaciones en la epidermis, en la mucosa nasal y tracto respiratorio”, cuenta el inmunólogo.
En definitiva, es fundamental el aseo, “las cucarachas y otros insectos dentro de la casa pueden ser portadores de enfermedades. Además, evitar humedades y hongos, que favorecen los problemas pulmonares y respiratorios. Se trata de mantener un equilibrio, el sistema inmune no es solo de defensa, la mayoría del tiempo está preservando una diversidad y un fenómeno de tolerancia; pero tiene reglas muy estrictas para hacerlo”.
Organización, el hilo conductor
Mónica González destaca los beneficios de tener esta práctica, en aspectos emocionales, laborales e incluso económicos. “Así voy a estar más tranquila y menos estresada. Se aprovechan mejor los tiempos, es más eficaz tener la cocina y el clóset organizados, por ejemplo, porque ya se sabe donde está todo. También se hacen compras más eficientes porque hay mayor conciencia sobre lo que se tiene”.
En general, tanto para la limpieza como para el orden, González sugiere tener rutinas y realizar una planificación semanal de los días, “para que no se acumulen el desorden y la suciedad. Y para quienes más les cuesta, lo ideal para motivarse es hacerlo de a poco, de lo pequeño a lo grande”, advierte. Así mismo, brinda algunas claves para lograrlo:
- Tener la disposición y ganas de hacerlo.
- Liberar espacios y depurar conscientemente lo que ya no se usa.
- Identificar los sistemas de organización ideales para cada área.
- Dar a cada objeto su lugar, usar cajas, canastas y marcar las cosas.
- Mantener el orden con rutinas.
Oficina en casa
Aquí la estructuración y planificación son protagonistas. Precisamente para adaptar un espacio sano de trabajo en el hogar, la organizadora Mónica González recomienda mantener despejado el escritorio e implementar cajas y divisiones en los cajones; una planta puede aportar frescura y se puede sumar un toque de personalidad con decoración, sin sobrecargar.