Las migrañas son dolores de cabeza recurrentes que suelen responder a factores determinados.
La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos destaca como factores desencadenantes de la enfermedad los cambios repentinos en el clima o el medio ambiente, los sobreesfuerzos relacionados con la actividad física, el tabaco, el hecho de saltarse las comidas, o el consumo de ciertos alimentos como los chocolates, quesos maduros, algunas frutas y nueces, productos fermentados o encurtidos, carnes curadas o procesadas y el alcohol.
El dolor de cabeza causado por una migraña puede ser punzante o vibrante y, a menudo, se presentan con síntomas como náuseas y sensibilidad a la luz y el sonido. Muchas veces se presenta precedida por un aura por la que se ven luces intermitentes o brillantes. o líneas zigzagueantes.
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Hacer de ciertas medidas de cuidado parte de su estilo de vida diario es clave para prevenir y tratar los brotes de la enfermedad. Para evitar que se presenten con mucha frecuencia, la Clínica de Mayo recomienda hacer ejercicios de relajación, dormir lo suficiente, e identificar los factores de riesgo asociados, especialmente aquellos relacionados con la alimentación, procurando evitarlos.
Cuando se sienten los primeros síntomas, se sugiere descansar en espacios oscuros y silenciosos, tomar medicamentos analgésicos cuanto antes y acudir a métodos como el uso de una bolsa de hielo envuelta en un paño en el cuello y ejercer presión con los dedos en las áreas de dolor. Así mismo se recomienda escribir en un diario sobre los dolores de cabeza, anotando los medicamentos, vitaminas, alimentos o actividad que tuvo en el día, para así para poder identificar los factores de riesgo que puedan estar asociados en cada caso.