Una mala alimentación, ya sea por exceso o insuficiencia de nutrientes, está relacionada con mayores riesgos de padecer cáncer.
La doctora Vanessa Fuchs le dijo a EFE que «la clave podría estar en los alimentos que ingerimos y que tienen propiedades antioxidantes, específicamente con polifenoles (sustancias químicas encontradas en plantas), que justamente tienen esa función», aseveró la jefa de nutrición clínica del Hospital General de México. La especialista señaló que la alimentación es una de las herramientas claves en la defensa contra algunos tipos de cáncer, pues si bien esta enfermedad en ocasiones tiene origen genético, en muchos casos se debe a factores externos.
Explicó que es por ello que una dieta deficiente en polifenoles está relacionada con un aumento de riesgo de cáncer, particularmente de mama, «aunque puede extenderse a cáncer de páncreas, ovario, piel, próstata, intestino y esófago». El té verde y negro, la curcumina, la granada y el brócoli están entre los principales alimentos que contienen alta cantidad de polifenoles.
Del mismo modo, Fuchs señaló que se debe tener cuidado con la forma de ingerir y preparar los alimentos que contienen polifenoles, pues sus propiedades pueden disminuir por factores como la exposición a la luz, el grado de conservación y la preparación de alimentos. «Por ejemplo, cuando se tiene la costumbre de pelar alimentos, muchas veces la cáscara es la que tiene el mayor contenido de polifenoles y la gente no la come», aseveró. En cuanto a la cocción de alimentos, dijo que puede disminuir hasta 75 % el contenido de polifenoles «ya que muchos de ellos son hidrosolubles y se quedan en el agua», detalló.
Finalmente, dijo que los polifenoles se pueden obtener también de suplementos alimenticios, los cuales son seguros siempre y cuando sean prescritos por un especialista.
Fuente: EFE