Toda nueva relación después de una separación representa un desafío, pero también es una oportunidad para vivir en compañía y volver a creer en el amor.
Asesora: Claudia María Moreno
Psicóloga y magíster en Psicología Clínica y de Familia
De acuerdo con la Asociación Estadounidense de Psicología, una familia reconstituida puede tardar entre dos a cuatro años para que se adapte a la nueva convivencia. Para Claudia María Moreno, psicóloga y magíster en psicología clínica y de familia, hay algunos puntos esenciales que se deben tener en cuenta cuando inician estas relaciones para que no haya desgaste. “No es fácil comenzar una relación pensando en los errores que se cometieron en la anterior. Por eso lo más importante es sanar y estar en paz. Es necesario que las dos personas estén sanas emocionalmente para no involucrar muchos elementos que pueden causar daño”, explica.
Para ello, más allá de la confianza entre la pareja, articular los proyectos de vida y poner en práctica lo aprendido de experiencias anteriores, algo que también es crucial es la conversación. Esta debe ser la base porque las relaciones se complican cuando se descubren algunas cosas mientras otras se callan y por eso el diálogo debe ser sincero. Al respecto la especialista recuerda que “es importante no guardarse nada porque genera resentimientos y malas interpretaciones. Siempre hay que mantener una comunicación transparente, que es muy diferente a que todo se tenga que contar, creo que a veces las personas confunden esa visión. Hay cosas que son individuales y privadas”.
A través de la conversación cada uno expone sus expectativas, qué esperan de la relación. Además, también es útil para hablar sobre cuáles son las dificultades, problemas o rasgos de la personalidad que deterioraron el compromiso anterior y cómo se deben manejar para no causar daños en lo que se está construyendo. Ante todo, las relaciones son una negociación y la mejor forma para llegar a acuerdos es por medio del diálogo.
Actitudes para la armonía
Es necesario que haya claridad con lo que se pretende conformar al iniciar una nueva relación. Pensar que una persona diferente va a suplir las necesidades o carencias del pasado no es sano. La experiencia debe ser útil en estos casos para poner todo ese aprendizaje al servicio del nuevo comienzo.
Existen muchas parejas que expresan que antes eran amigos y su relación era mejor; la idea es que ese vínculo de amistad permanezca, debido a que el compromiso no quiere decir que todo deba cambiar, por el contrario, el propósito es que se estrechen más los lazos con esa persona con la que se identifica o considera la adecuada para recorrer un nuevo camino. “Ambos deben ser conscientes que cada persona tiene una vida pasada y que hay que respetar esto para partir de que están ante una oportunidad de renacer en una nueva relación”, asegura la psicóloga Moreno.
Las familias deben comprender que una separación es normal y en muchos casos es la mejor solución ante una situación desgastante, pero esto no exime de las responsabilidades adquiridas durante la relación en el rol de padres y madres hacia los hijos en caso de que así sea.
Así se tenga una buena relación con los hijos de la nueva pareja, esto no quiere decir que una persona deba asumir el papel de quien realmente lo tiene. “Es importante al entrar a una nueva familia que acepté que la otra persona tiene hijos, obligaciones y que no puedo pretender que ya no las tenga porque las adquirió desde antes. La vida no es un constante ‘borrón y cuenta nueva’”, agrega. Aunque son valiosos los comentarios y posturas de cada miembro del grupo familiar, las parejas, incluso reconstituidas, deben mantener la autoridad. Los niveles jerárquicos de la familia no se pueden perder para ganar la aceptación de los demás.
Trabajo en equipo
En la construcción de la relación es clave la participación y el compromiso de las dos partes, pues cada uno debe aportar. Por medio del trabajo en equipo se trazan unos objetivos colectivos para llegar a una meta, cuando no se trazan aparecen las dificultades, desacuerdos y problemas.
Las finanzas son un tema clave en estos nuevos comienzos y hay muchos factores que influyen. La especialista considera que distribuir los gastos 50/50 no es lo más recomendable. “Hay que ser realistas en que los salarios no son iguales. Alguno puede tener mejor salario que el otro. Se debe hablar sobre la capacidad de endeudamiento, obligaciones, salarios para no crear falsas expectativas. Qué es lo colectivo y qué se puede asumir de manera individual. A la gente no le gusta coger papel y lápiz para hacer un presupuesto, pero es algo necesario”.
Las separaciones se deben abordar con total normalidad, puesto que son cambios inherentes a la vida y ante los constantes desacuerdos se toma la decisión de terminar la relación. Los niños son muy susceptibles y en muchas ocasiones son quienes recomiendan esta solución debido a que entienden que las cosas no son funcionales, ellos no son ciegos frente a esa realidad, pero siempre deben estar incluidos en la conversación y expresarles que hay incompatibilidades que pueden desencadenar en este tipo de casos y que también existe la posibilidad de conformar un nuevo hogar, pues las familias cambian pero no se destruyen.
Responsabilidad y sinceridad
Hay personas que tienen obligaciones con su familia nuclear, es decir, apoyan a sus padres, pasan mucho tiempo con ellos y se encargan de las responsabilidades del hogar. Esto debe entenderse y respetarse para que no se establezcan juicios o se analice determinada situación de manera equivocada, porque hay ciertas intimidades que solo se entienden al interior de ese grupo familiar.
Por otra parte, hoy se habla de muchas libertades y diferentes formas relacionales, por eso existen personas que después de muchos años descubren su verdadera inclinación sexual, pero para algunos abordar este tipo de realidades resulta incómodo. Ante este tema Moreno recomienda la asistencia profesional para enfrentar la situación. “Lo importante es que lo tenga claro y si se siente muy inseguro asista a un proceso terapéutico que parta de la honestidad y de ser transparentes con sus sentimientos, porque en una relación se genera resentimiento cuando alguna de las personas se siente engañada; la mentira nunca es buena” •
16.554 divorcios se presentaron en 2020 en el país, según la Superintendencia de Notariado y Registro.
Aprovechar las segundas oportunidades
1. Dialogar es clave porque es probable que la anterior relación haya dejado enseñanzas. Hablar sobre las expectativas y qué espera de la vida de pareja.
2. Estar en paz con el pasado a pesar de lo sucedido es válido para volver a creer en el amor. No todas las personas son iguales y ya hubo un camino con errores que dejaron enseñanzas y conocimiento.
3. Disfrutar el camino porque se trata de un proceso con una persona distinta que no debe cargar con las dificultades, miedos e inseguridades ajenas.