Adormecimiento y dolor en las manos, sensación de descarga eléctrica, sobre todo en los dedos pulgar, índice y medio y dolores que recorren el brazo y suben hacia el hombro son los síntomas más comunes del Síndrome del Túnel Carpiano. Por lo general estos comienzan a manifestarse gradualmente sin una lesión específica.
El túnel carpiano es un paso estrecho de ligamentos y huesos en la base de la mano que contiene nervios y tendones. Algunas veces el engrosamiento de los tendones irritados u otras estructuras hinchadas estrechan el túnel y causan compresión de los nervios. Es, incluso, una enfermedad laboral común acogida en la Tabla de Enfermedades Laborales del Ministerio de Trabajo.
La detección y tratamiento tempranos son importantes para prevenir daño permanente a los nervios. La manera de diagnosticarlo es a través de un examen físico y exámenes específicos de los nervios. El tratamiento incluye reposo de las manos, uso de férulas, medicinas para el dolor y la inflamación y, a veces, cirugía.
La página Web Consultas recomienda a las personas disminuir posiciones incómodas de las muñecas y los movimientos manuales repetitivos, así como reducir la vibración de las herramientas manuales, disponer de más descansos y adecuar el puesto de trabajo a la medida de los antebrazos.
El síndrome puede ser agudo o crónico:
La forma aguda: es poco frecuente y se debe a un aumento súbito y sostenido de la presión en el túnel carpiano (suele estar asociado a una fractura de radio).
La forma crónica: es la más común y los síntomas pueden persistir durante meses o años. Suelen padecerla personas con ocupaciones como cajeros, envasadores, carniceros, trabajadores de costura, entre otros.