Es uno de los alimentos con mayor interés nutricional, por lo que se trata de una buena alternativa a la carne y al pescado.
El huevo se destaca por su aporte de proteínas, vitaminas (A, D y B12) y minerales (fósforo y selenio), además de otros nutrientes “esenciales en las etapas de crecimiento y en circunstancias fisiológicas especiales como el embarazo, la lactancia y la vejez”, de acuerdo a la Guía de Alimentación Saludable de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria.
El color de la cáscara de los huevos (sea blanca o roja), no condiciona su valor nutricional. La proteína de mayor calidad biológica se encuentra en la clara, mientras que la yema contiene grasa, hierro, azufre, las principales vitaminas y otras proteínas menores. La Fundación Española del Corazón explica que para “aprovechar completamente la clara de huevo hay que cocerla, ya que contiene algunos antinutrientes (avidina y ovomucoide) que se inactivan con el calor”. El consumo de yema podría reducirse, pues esta es rica en grasa y colesterol.
También le puede interesar: Comer crudo y saber por qué comer así
“El consumo de tres o cuatro huevos por semana es una buena alternativa gastronómica”, indica la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria.