Con la práctica de una disciplina deportiva o de una rutina de ejercicios de forma regular, será más fácil eliminar el estrés de su vida. Estos son algunos de los beneficios.

El movimiento es probablemente el mejor antídoto que existe contra el estrés. Desde la práctica de aeróbicos o yoga, hasta el levantamiento de pesas, el ciclismo o el senderismo; prácticamente cualquier tipo de ejercicio que incluya en su rutina es esencial para combatir esta respuesta y liberar su cuerpo.

La Clínica Mayo explica cuatro beneficios clave:

– Más endorfinas: ese es el nombre que reciben los neurotransmisores del cerebro que generan la sensación de bienestar y felicidad. Cualquier actividad aeróbica puede aumentar su producción y provocar la sensación.

– Bienestar general: el ejercicio activa gran parte de los sistemas corporales de forma simultánea (como el cardiovascular, digestivo e inmunitario, por ejemplo) y los obliga a trabajar en conjunto, generando efectos físicos positivos.

– Liberación mental: al estar concentrado principalmente en los movimientos del cuerpo durante una práctica deportiva, probablemente su mente olvide la irritación o los problemas del día. Deshacerse de las tensiones diarias a través del movimiento ayuda a mantener la calma, la tranquilidad y la concentración.

– Mejor estado de ánimo: si se practica con regularidad, el ejercicio aumenta la confianza, relaja y disminuye la ansiedad, además de mejorar el sueño. Todos beneficios para la mente y que brindan una sensación de dominio sobre el cuerpo.

¿Cómo empezar?

Establecer metas alcanzables a corto plazo, encontrar un compañero de entrenamiento y realizar ejercicio en tandas cortas puede ayudar a iniciarse en la práctica. Sin embargo, lo más importante es realizar una actividad disfrutable y que pueda incorporar en su estilo de vida al menos durante 150 minutos a la semana.

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