La nutricionista Sandra Alfaro, prestadora de la red médica de Coomeva Medicina Prepagada, es considerada como la mejor en su área en América Latina.
“Trabajo siempre pensando en las personas, en poder ayudarles a que tengan un cambio consciente en sus hábitos alimenticios”, dice la doctora Sandra Alfaro, nutricionista colombiana reconocida como la Mejor de Latinoamérica en el XL Congreso Internacional de la Salud de la Organización Internacional para la Capacitación y la Investigación Médica, Iocim, 2018.
A finales de abril, la Iocim la galardonará de nuevo en su especialidad en el XLII Congreso Mundial 2019, esta vez en Iguazú, Argentina, logros que adjudica a sus 25 años de experiencia y a la posibilidad de impactar en la calidad de vida de distintas comunidades del país desde su profesión, su pasión por la enseñanza y la investigación científica. La educación es su bandera. “Soy una apasionada por la nutrición en todos sus aspectos y me parece fundamental que un especialista en esta área tenga gusto por la cocina, conozca bien el origen de los alimentos y las formas en que estos se pueden combinar para un mejor provecho”, explica la especialista, doctora del Centro Médico Imbanaco en Cali y prestadora de la red médica de Coomeva Medicina Prepagada.
Cómo trabaja
Su método trasciende la convencional dieta escrita y la cita en consultorio, pues procura comprender los contextos de sus pacientes y acompañarlos en sus rutinas para que aprendan a cambiar sus hábitos alimenticios. “Nosotros, el personal de salud, somos educadores. No solo le estamos diciendo a la persona que se tome un medicamento o haga una dieta. Todo se logra cuando a uno le gusta lo que hace”, agrega.
Explica, entonces, que la pedagogía debe hacerse teniendo en cuenta a las personas, sus costumbres, sus recursos y habilidades para llegarles con el método más adecuado. Ha trabajado con diferentes públicos: deportistas de alto rendimiento, principalmente futbolistas, con niños de instituciones educativas, pacientes con obesidad y otros con enfermedades crónicas, quienes aprendieron con el tiempo a entender sus necesidades alimenticias y a ser más conscientes de sus hábitos.
“Siempre hago que la gente mire hacia su propio ser y saquen el concepto de que todo está afuera. Así es que cada individuo puede conocer su metabolismo y las reacciones químicas y bioquímicas que este realiza para cumplir esas funciones. Cuando identifican esto quedan asombrados de la responsabilidad que tienen con su propio cuerpo”, concluye.
Tenga en cuenta
Sandra Alfaro estudió Nutrición en la Universidad de Antioquia, Bioquímica en la Universidad del Valle y cursó una maestría en Nutrición Clínica de la Universidad Internacional Iberoamericana en México.