Del acompañamiento de la madre depende la exitosa recuperación de un bebé prematuro en su camino de adaptación al medio externo. La unidad neonatal en una institución hospitalaria debe estar dotada de los elementos necesarios, así como del personal capacitado para atender el caso.
Lo primero que se debe entender es cuándo un bebé se considera prematuro. La respuesta es una: cuando nace antes de haber completado la semana 37 de gestación. Normalmente el embarazo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), dura unas 40 semanas. Los factores de riesgo del pequeño, entonces, dependen de qué tan prematuro sea. En Colombia, la viabilidad de supervivencia de un recién nacido está por encima de las 26 semanas (seis meses y medio de gestación). En el mundo, esta variable es de cinco meses.
«El riesgo inicial más importante es el que tiene que ver con la parte respiratoria. Como los pulmones están inmaduros, la mayoría va a presentar dificultades para adaptarse a estar fuera de la mamá. Adicional, hay posibilidades de una hemorragia en la cabeza, más probabilidades de tener intolerancia a la alimentación, infecciones y problemas oculares. Entonces es fundamental estar vigilando el proceso de recuperación», explicó María Eulalia Tamayo, pediatra neonatóloga.
La especialista asegura que un buen tratamiento de adaptación depende, en gran parte, de la constancia de la madre. «El apoyo de la mamá es elemental, tanto para que lo acompañe, como para que cumpla la labor de Mamá canguro, establezca una relación de apego con el chiquito y lo alimente con leche materna. Ellos las sienten; se tranquilizan, evolucionan», agregó.
Es vital tener un adecuado control prenatal durante el embarazo, con los exámenes indicados por el médico con el fin de detectar de forma temprana cualquier anormalidad. Más información sobre guías y cuidados durante esta etapa en Medline.
Panorama en el país
La prematuridad en Colombia está en alrededor el 10% de los casos de todos los recién nacidos. Es decir, que por 10 nacimientos, uno se da en esta categoría. Las razones, argumenta la profesional, se dan por enfermedades de las maternas que obligan a terminar su gestación, causas del bebé y otras situaciones, aún desconocidas, que hoy son objeto de investigación. La Asociación Colombiana de Neonatología calcula que en el país mueren 12 de cada 1.000 bebés nacidos antes de tiempo. Sin embargo, la región carece de datos y cifras específicas que revelen el real panorama de esta situación.
«La prematuridad ha ido aumentando porque las mujeres esperan más para tener hijos, hay más problemas de fertilidad y posibilidad de embarazos múltiples, pero también ha crecido la supervivencia de ellos, ya esos niños no mueren, entonces nos enfrentamos a la necesidad de saber qué está pasando con estos chiquitos y conocer qué tan grande es el tema en Colombia. Tenemos poca información de eso», concluyó la médica.
Actualmente ella y un equipo extenso de especialistas, entidades e instituciones trabaja para alimentar la Red de Apoyo a la Prematurez y así concretar causas, prevención y atención que ayuden a promover las buenas prácticas y la calidad en el cuidado neonatal. Los pasados 4 y 5 de marzo, se efectuó en Bogotá la II Cumbre Global para la Protección de la Prematurez con la participación de médicos nacionales e internacionales con el objetivo de socializar y retroalimentarse en este asunto.
Es difícil saber el tiempo que un bebé prematuro permanece en la Unidad Neonatal. Su salida, más o menos, podría darse para la época en la que debía nacer.