El 13 de junio se conmemora el Día Mundial del Cáncer de Piel, pero más que una fecha fija es la excusa para tomar conciencia sobre esta enfermedad y su prevención. La Sociedad Americana de Cáncer indica que pese a ser el más común, solo 1 % de los casos corresponden a melanoma, causante de la mayoría de decesos.
Pero, ¿qué es en sí un melanoma? Se origina cuando los melanocitos, células que dan el color marrón a la piel, crecen sin control. Pero además de esta clase, la Clínica Universidad de Navarra explica que, entre los no melanomas, están los carcinomas basocelular y espinocelular, ambos comienzan en la capa superior de la piel (epidermis), normalmente asociados a la exposición solar cuando dichas células se reproducen exageradamente, las basales están en la parte interna de la epidermis, mientras las escamosas en la externa.
Sol sí, pero con cuidado
Si bien la luz solar es indispensable para la vida, recibirla de forma intensa y descuidada puede provocar quemaduras, manchas, envejecimiento prematuro y, lo más severo, cáncer, relacionado en la mayor parte de los casos con la exposición solar, mientras que otros tienen componentes hereditarios.
¡Pero no solo es el sol! También se recibe radiación por cuenta de la luz de las ventanas, de la artificial y de las pantallas, que afecta incluso de manera indirecta, dejando rastros en la piel. Como lo explica el dermatólogo y especialista en Dermatología Estética, Carlos Quiroz, este efecto es acumulativo y progresivo, por eso es fundamental visitar al especialista frecuentemente, además de “proteger las áreas que siempre olvidamos: orejas, cuello, pecho y escote. Aplicar fotoprotección 30 minutos antes de la exposición y reforzar cada dos horas. Igualmente, complementar con gafas, sombrero, barra labial para labios e hidratación constante, si se está al aire libre por períodos de tiempo extensos”.

6 datos para la fotoprotección
El sitio web Radiance, de WebMD, brinda estas recomendaciones:
Elige el protector solar según tu tipo de piel.
- Verifica que no presentes alergias a los componentes.
- Aplícalo mínimo 15 minutos antes de exponerte, aplica cada dos horas.
- ¡No lo frotes! Pon una capa delgada y deja que se absorba.
- ¡Los ojos también se pueden quemar! Utiliza gafas solares.
- Hay medicamentos, como el Ibuprofeno y los antibióticos, que hacen la piel más fotosensible y minimizan el efecto del bloqueador.