Conocer con detalle la actividad eléctrica del corazón en tan solo unas horas es posible gracias al holter, un dispositivo que el paciente lleva adherido a su cuerpo durante 24 horas y que registra los datos a analizar por el médico, mientras la persona realiza sus actividades cotidianas.
La Revista Colombiana de Cardiología, de la Sociedad de Cardiología y Cirugía Cardiovascular de este país, resalta que es útil solicitarle al médico este tipo prueba cuando hay anomalías asociadas al corazón o en el caso de sospecha de las siguientes enfermedades:|
- Desmayos o síncopes de repetición: aunque un desmayo aislado no es motivo de preocupación, cuando se repiten espontáneamente y se sospecha que la causa es cardíaca, un holter puede ayudar a averiguar qué tipo de alteraciones cardíacas existen de base.
- Palpitaciones: la sensación de que el corazón late más deprisa de lo habitual, o la impresión de notar latidos en el cuello, pueden ser signos de arritmias en personas de cierta edad. Si es una sensación intermitente, un holter puede identificar alteraciones a lo largo de día.
- Tras un infarto: dependiendo de cómo haya sido el infarto (extensión, gravedad, afectación de las vías eléctricas, etcétera) se puede indicar la realización de un holter para detectar a tiempo alteraciones eléctricas que puedan ser fatales.
- Estudio de arritmias: aunque la arritmia cardíaca sea conocida, un estudio ayuda a identificar las causas que la desencadenan, su duración y clasificación en tipos concretos (taquicardia supraventricular, bloqueos, fibrilación auricular, entre otras).
- Estudio de miocardiopatías: las miocardiopatías son enfermedades del propio músculo del corazón por motivos independientes al infarto y a las arritmias. Sin embargo, pueden ser en sí mismas causa de arritmias y el holter puede identificarlas, aún cuando no dan síntomas.
- Monitorizar el tratamiento con fármacos: muchos de los tratamientos con fármacos cardiológicos requieren la comprobación de sus efectos en el ritmo eléctrico del corazón a lo largo del día.
Tenga en cuenta:
El holter es una prueba que no supone ningún riesgo para las personas que la realizan. La única complicación que se conoce de ella es que algunos de los sensores que se pegan a la piel pueden llegar a irritarla en personas especialmente sensibles, algo poco frecuente.