Una articulación es la zona donde dos huesos se encuentran. Cuando se inflaman o degeneran se produce la artritis.

Según el portal MedlinePlus existen más de 100 tipos diferentes de esta enfermedad, que involucra la degradación del cartílago, cuya función es proteger una articulación y permitir que esta se mueva de forma suave. Una enfermedad autoinmune (el sistema inmunitario del cuerpo ataca por error al tejido sano), una fractura ósea, el desgaste y deterioro general de las articulaciones, una infección (con frecuencia por bacterias o virus), son algunas de las patologías que ocasionan la alteración articular.

En la mayoría de casos, la molestia desaparece después de que la causa recibe tratamiento. Sin embargo, si continúa y se cumplen con unos requisitos evaludos por el médico, se denomina artritis prolongada, es decir crónica.

Los tipos más conocidos de esta patología son:

• Osteoartritis: la más común. Se relaciona con el envejecimiento o una lesión.
• Autoinmune: ocurre cuando el sistema inmunitario ataca por error los propios tejidos en el cuerpo. La artritis reumatoide es la más conocida.
• Juvenil: afecta a los niños.
• Infecciosa: se da cuando una infección se disemina desde una parte del cuerpo hacia las articulaciones.
• Psoriásica: afecta a personas con esta enfermedad (psoriasis), frecuente de la piel y que acelera el ciclo de vida de las células cutáneas.
• Gota: es muy dolorosa y se presenta cuando el ácido úrico se acumula en exceso en el cuerpo. A menudo se inicia en el dedo gordo del pie.

Con el paso del tiempo, una articulación hinchada puede lesionarse gravemente. Algunos tipos de artritis también causan problemas en otros órganos, como los ojos o la piel.

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