Bacterias, toxinas o parásitos pueden ser la causa asociada a la aparición de la gastroenteritis, una inflamación del estómago y los intestinos.

La infección con el norovirus (grupo de virus relacionados) provocan esta enfermedad, de la que las personas se contagian unas a otras por medio de agua no potable o alimentos contaminados. También puede adquirirse cuando se toca una superficie infectada. Esta patología requiere de una atención especial en niños pequeños y adultos mayores. En la mayoría de casos desaparece por sí sola.

El portal MedlinePlus, indica que la diarrea, náuseas, vómitos, dolor abdominal, fiebre, cefalea o malestar general son los síntomas más comunes de la gastroenteritis, por lo que su tratamiento incluye descanso y beber líquidos para prevenir la deshidratación. Asímismo, las pautas de prevención son un adecuado lavado de manos y un manejo óptimo de las verduras, frutas, carnes, entre otros ingredientes, cuando estos se cocinan.

Tenga en cuenta

Las bacterias salmonella y campylobacter son las que más causan diarrea en los países desarrollados. Ambas infecciones se adquieren, en la mayoría de los casos, por el consumo de pollo mal cocido y leche no pasteurizada. En algunos casos, el campylobacter se transmite por perros o gatos con diarrea. La salmonella se transmite mediante la ingestión de huevos crudos o semicrudos y al tener contacto con reptiles como tortugas o lagartos, aves, o anfibios como ranas y salamandras.

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