Durante los meses de embarazo es frecuente que las gestantes tengan problemas para dormir bien dados algunos síntomas como las náuseas, la gastritis, la acidez estomacal y las ganas de orinar debido a la presión que tiene que soportar la vejiga.
A continuación recopilamos algunos consejos de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, para lograr tener un mejor sueño:
- Duerma recostada de lado, con las rodillas dobladas de modo que mejore el flujo de sangre entre el corazón, el feto, el útero y los riñones. Esta es la posición más cómoda para conciliar el sueño.
Evite comer porciones muy grandes de alimentos en la noche que puedan incrementar la sensación de gastritis o reflujo. - Comer galletas de sal antes de irse a dormir es una buena idea para reducir la sensación de náuseas.
Después del mediodía no ingiera bebidas oscuras ni estimulantes como el café y el té que dificultan conciliar el sueño y además tienen un efecto diurético. - Para dormir, use una almohada o cojín entre las piernas, o por debajo del vientre, de modo que la cadera se sienta más relajada y se evite la presión excesiva sobre la misma.
- Reponga el sueño perdido con pequeñas siestas durante el día. Tenga en cuenta que en esta época es cuando su cuerpo más necesita horas reparadoras de sueño que le ayuden a obtener toda la energía necesaria para formar a su bebé.