El Síndrome de Piernas Inquietas (SPI) es una enfermedad neurológica que afecta la calidad de vida quienes lo padecen, porque les impide descansar plenamente mientras duermen. Se caracteriza por molestias en las piernas y la necesidad incontrolable de moverlas. La mayoría de pacientes no alcanzan a ser diagnosticados certeramente.
Según el portal médico MedlinePlus, “algunas personas describen el SPI como la sensación de que algo se arrastra o trepa por sus piernas, hay hormigueo o un ardor”, y la Organización Mundial de la Salud, advierte que en el 80% de los casos los individuos presentan movimientos periódicos involuntarios y repetitivos de las extremidades durante el sueño, lo que les ocasiona dificultad para conciliar el sueño y despertares. Su prevalencia (personas afectadas) aumenta con la edad y es más frecuente en mujeres, sobre todo, si han tenido embarazos
Entre los factores de riesgo, explica la OMS, están la predisposición de genes, el sufrir insuficiencia renal o tomar determinados fármacos como los antidepresivos (Conozca más causas y factores de riesgo). Para su dictamen se emplean pruebas de laboratorio del sueño, que definen la severidad del cuadro cuando miden la aparición de mioclonías cuando el paciente está en reposo.
Solo el 20% de quienes lo padecen están diagnosticados; y el 80% restante, con frecuencia, suele recibir un análisis asociado a otros problemas como enfermedades de tipo reumático, ansiedad o carencias del sistema circulatorio. Por lo que es recomendable que se asesore con un especialista en el tema si está presentando algunos síntomas asociados al SPI.
Este Síndrome está asociado a otra patología como el párkinson, diabetes, enfermedad renal crónica o anemia.