Las muletas ortopédicas pueden ser una opción útil después de una lesión o cirugía de las piernas o si solo necesita un poco de ayuda con el equilibrio y la estabilidad. También sirven cuando sus extremidades están un poco débiles o adoloridas. Podría necesitar de 1 a 2 para que le ayuden a apoyar su peso corporal.
Es frecuente que por un esguince, fractura u otra lesión en el pie, rodilla o tobillo, una persona que haya caminado con normalidad tenga que utilizar muletas o ayudas externas durante un tiempo.
Vanessa García, fisioterapeuta, asegura que el uso regular y correcto de las mismas ayudará a la persona a favorecer la independencia con este tipo de lesiones. «Son utilizadas para la rehabilitación de un paciente en situación de discapacidad o que ha tenido algún tipo de trauma que afecte sus actividades de la vida diaria. Son útiles para evitar la descarga del peso corporal total sobre las extremidades inferiores y para la reeducación de la marcha (recuperación)», indicó la profesional.
Los caminadores y bastones también son usados en procesos de recuperación que incluyen alteraciones del equilibrio por traumas o patologías. García aconseja a los pacientes no subestimar los beneficios de las muletas para lograr una exitosa mejora y así puedan retornar, sin complicaciones, a sus actividades cotidianas.
El portal médico MedlinePlus y Vanessa García, también especialista en Rehabilitación Pulmonar en Pacientes Críticos recomiendan algunos tips para su uso.
Lo básico de las muletas
– Deje que las manos carguen el peso, no las axilas.
– Mire hacia adelante cuando esté caminando, no a los pies.
– Use una silla con apoyabrazos para que sentarse y pararse sea más fácil.
– Verifique que las muletas se ajusten a su estatura. La parte superior debe estar a dos dedos debajo de la axila. Los mangos deben estar al nivel de la cadera.
– Los codos deben estar ligeramente flexionados cuando agarre los mangos.
– Mantenga las puntas de sus muletas aproximadamente a 3 dedos de distancia de los pies para no tropezarse.
– Recueste sus muletas al revés cuando no las esté usando para que no se caigan.
Caminar y girar
– Cuando usted camine usando muletas, muévalas hacia adelante en lugar de la pierna débil.
– Ponga las muletas a aproximadamente 30 centímetros delante de usted, con una separación ligera más amplia que su cuerpo.
– Apóyese en los mangos de las muletas y desplace su cuerpo hacia adelante. Use las muletas como apoyo. No dé un paso hacia adelante sobre la pierna débil.
– Termine el paso balanceando la pierna fuerte hacia adelante.
– Repita los pasos 1 a 3 para desplazarse hacia adelante.
– Gire haciendo eje sobre la pierna fuerte, no sobre la débil.
– Vaya poco a poco. Puede tardar un tiempo acostumbrarse a este movimiento.
Para subir y bajar escaleras, para ponerse de pie y sentarse también hay instrucciones. La plataforma digital Foot Healt Facts le indica los paso a paso.
Las muletas funcionan como soportes ortopédicos durante el traslado de un lugar a otro.