Es buena para la digestión, ayuda a controlar el apetito, regula los niveles de colesterol y de glucosa en
la sangre.
Asesora Amida Carvajal Guzmán
Nutricionista
En cuestión de nutrición, es imprescindible conocer las propiedades que hay detrás de los alimentos que se consumen, esto ayuda a las personas a ser conscientes de la importancia que tiene para el organismo la sana alimentación. En este caso, la fibra cumple un papel fundamental.
Amida Carvajal Guzmán, nutricionista clínica de la Universidad de Antioquia, educadora en diabetes y especialista en el manejo de enfermedades metabólicas, asegura que una singularidad de este componente está en que en realidad no se trata de un nutriente, por esta razón, el cuerpo no puede digerirla, favoreciendo así el tránsito intestinal.
La especialista considera, por tanto, que su función principal es evitar el estreñimiento, ayudar a prevenir enfermedades como el cáncer de colón, la colitis ulcerativa y además juega un papel importante en el manejo del síndrome de intestino irritable, en la disminución del colesterol y en el equilibrio de los carbohidratos. Entre sus consecuencias negativas están el dolor abdominal, las hemorroides y la enfermedad diverticular.
“Si se quiere perder peso, la fibra es una gran aliada dentro de la dieta, este alimento ayuda a controlar el apetito por su efecto saciante, evita la acumulación de toxinas en el organismo y disminuye la absorción de grasas y azucares, por lo que regula los niveles de colesterol y glucosa en la sangre”, expresa Carvajal.
Identifique el tipo de fibra
Existen dos tipos de esta sustancia: la soluble e insoluble. La primera se encuentra en el salvado de avena, las nueces, las semillas, los frijoles, las lentejas, al igual que en algunas frutas cítricas. Según Amida Carvajal, sus componentes retienen gran cantidad de agua y crean una especie de gel viscoso en el organismo, cuya acción es retrasar la absorción de grasas.
Por su parte, la fibra insoluble se halla en alimentos como el salvado de trigo, las verduras y los granos integrales. Es importante porque incrementa el bolo fecal por captación de agua, tiene efecto laxante y no es fermentable, obliga a masticar, por lo que aumenta la sensación de saciedad.
Según la profesional, excederse con alimentos altos en fibra podría ser perjudicial en el caso de algunas dietas veganas pues genera problemas de absorción de calcio, hierro y zinc. Para evitarlo, se aconseja consultar con un nutricionista, quien recomendará cuáles son los suplementos para no crear desequilibrio en el organismo. Así, la fibra se convierte en el mejor aliado para una dieta balanceada, saludable y que no es tan difícil de establecer como un hábito.
Hábitos bajo control
¿Cuándo hay que suplementarse de fibra? Siempre hay que intentar comenzar con fuentes naturales, aumentando la cantidad para lograr la adaptación intestinal antes de usar una comercial para laxar. De no lograrse, además de realizar cambios en los hábitos alimenticios en casos de estreñimiento o diverticulosis, se adicionaría la fibra comercial acompañada de mucha agua.