Es una disciplina que fortalece el cuerpo y la mente. La práctica continua ayuda a lograr un mayor bienestar. Conozca cinco posturas básicas.
Gloria patricia abad Nutricionista y dietista.
El incremento de la obesidad que se registra en las últimas tres décadas ha llevado a que hoy en día sea considerada por muchos no solo una epidemia sino el principal problema de salud del siglo XXI.
Los cambios en los estilos de vida que surgen en este periodo potencian la situación. El caso es más grave en los niños que, con las nuevas tecnologías son cada vez más inactivos. La televisión, sumada al auge de los dispositivos móviles, los videojuegos y las redes sociales que los alejan de la actividad física, conduce a que un trastorno como la obesidad, que solía ser exclusivo del mundo adulto, sea hoy una realidad preocupante entre lo más chicos.
Múltiples estudios indican una relación entre el incremento de la obesidad y una doble problemática atada a la televisión: la quietud de muchos niños que pasan horas sentados frente a esta, sumada a la exposición a los comerciales. En Estados Unidos, por ejemplo, se encontró que por cada hora de televisión, 23 anuncios publicitarios sugieren alimentos poco sanos.
Y es que, aunque gran porcentaje de los casos de obesidad responden a la genética, la verdad es que actualmente las causas ambientales son mayores. Contrarrestar la obesidad es posible, educando en buenas costumbres desde la infancia e implementando acciones que lleven a las personas a tener una vida más activa y saludable.
Ambientes obesogénicos
Los ascensores, la mayor accesibilidad al transporte y los computadores, entre otros inventos que facilitan la vida, nos han llevado a ser más inactivos. A esto se suman las costumbres familiares, la publicidad y el fácil acceso a alimentos no saludables.
1 de cada 2 latinoamericanos tiene sobrepeso u obesidad, mientras el promedio global es 1 de cada 3
TV, tablets y smartphones
El abuso de la tecnología por parte de los niños es uno de los principales detonantes del sedentarismo, pues pasan demasiado tiempo quietos frente a estos dispositivos y esa falta de movimiento, juego y ejercicio, los termina llevando a padecer de sobrepeso.
Enfermedades asociadas
Además de ser unos de los principales factores de riesgo de enfermedades cardíacas y cerebrovasculares, la obesidad conlleva al desarrollo de diabetes, resistencia a la insulina, triglicéridos, hipertensión, dificultades para dormir y problemas articulares.
50% de los trastornos de sobrepeso responde a factores diferentes a los genéticos.
2 años es la edad en la que se debe comenzar un control anual de la curva de crecimiento.
En el sitio www.revistasaludcoomeva.com puede obtener más información sobre los trastornos de sobrepeso.
Hábitos frente al sobrepeso
- Busque espacios para ponerse en movimiento: acciones simples como subir escalas, dar un paseo o practicar un deporte le ayudarán. Si sufre o está en riesgo de sobrepeso ejercítese por lo menos 30 minutos al día, tres o más veces por semana.
- Una alimentación y educación nutricional adecuada durante la niñez y la adolescencia es clave para reducir el riesgo de obesidad. El llamado es a que, desde pequeños, se enseñe a los niños a tener una dieta rica en verduras y alimentos altos en fibras y proteínas.
- Para lograr una alimentación saludable incluya en su dieta diaria 5 porciones de frutas y verduras; incremente el consumo de agua y evite el de bebidas gaseosas. Igualmente, evite al máximo el consumo de alimentos procesados como cereales y mecatos de paquete.
Fuentes: Overseas Development Institute. / Encuesta Nacional de Situación Nutricional en Colombia.