La forma de alimentar a su bebé es una decisión crucial para su correcto desarrollo, asegúrese de tomar el camino correcto.
El amamantamiento es la forma natural de la especie humana para alimentar a sus hijos. Según el Ministerio de Salud de Colombia, «la leche materna es el mejor y único alimento que una madre puede ofrecer a su hijo tan pronto nace, no solo por su contenido nutricional, sino también por su contribución emocional, porque el lazo afectivo que se establece entre la madre y su bebé constituye una experiencia especial, que vincula al padre y a la familia».
Por eso, elegir entre la lactancia materna y la lactancia con leche de fórmula es una decisión crucial que muchos padres deben afrontar y que deben tomar apoyados en el consejo profesional y la ayuda de especialistas en el tema como las denominadas doulas que asesoran a la madre cuando no es apta para lactar.
Organizaciones como la Academia Americana de Pediatría (AAP), la Asociación Médica Estadounidense (AMA), la Asociación Dietética Americana (ADA) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), recomiendan la lactancia materna como mejor opción para alimentar a un bebé. «La lactancia materna ayuda a defenderse de las infecciones, a prevenir alergias y a proteger contra diversas afecciones crónicas», explican desde el portal KidsHealth.
Por otro lado, sostienen desde KidsHealth, el alimento con leches infantiles intenta reproducir la leche materna utilizando complejas combinaciones de proteínas, azúcares, grasas y vitaminas que sería imposible fabricar en casa. «Por lo tanto, si usted decide no amamantar a su bebé, es importante que le dé solamente suplementos de fórmula comercializados en vez de intentar elaborar una por sí misma».
Beneficios de la lactancia para madre e hijo
Juan Camilo Mesa, nutricionista, dietista y microbiólogo de la Universidad Javeriana, expuso en la red social Twitter, algunas de las ventajas de la lactancia para la madre: menor riesgo de cáncer de ovario y seno; también de padecer diabetes tipo 2, hipertensión arterial, artritis y enfermedades cardiovasculares, entre otras. A eso se le suman los beneficios hormonales como son mayor presencia de las hormonas prolactina y oxitocina, claves en el sistema reproductor y endocrino.
Para el bebé, por otro lado, con la leche materna se disminuye el riesgo de enfermedades prevalentes en la infancia, se evita la desnutrición y enfermedades crónicas en la adultez; además de ganar un mejor sistema inmune.
Si bien la lactancia es una decisión personal de cada madre, es importante considerar las evidencias científicas y los portales de salud adecuados para informarse como el de la OPS y acudir al consejo médico según su caso particular.
Prográmate para la Semana de la Salud de Coomeva Medicina Prepagada, más información aquí.