La hinchazón de las adenoides, tejido situado en la parte alta de la garganta, detrás de la nariz, resulta molesta para los niños.
Asesora Adriana María Aguirre Roldán, médica familiar
Las adenoides son tejidos linfáticos que funcionan como un filtro instalado en el acceso del conducto que conecta a la nariz y la garganta. Su función principal es la de atajar el ingreso de partículas de todo tipo como polvo o gérmenes, para lo cual se apoya en los pelitos conocidos como cilios que hacen las veces de “escoba” y producen los mocos, que cumplen una tarea vital en la retención de cuerpos extraños para que no lleguen a los pulmones ni a los cornetes. Su inflamación, explica la médica familiar Adriana María Aguirre Roldán, es conocida como adenoides hipertrófica, una molesta hinchazón que hace que se aumente la producción de moco y se acumulen los virus y las bacterias que ocasionan infecciones.
Esta patología se da, por lo general, en niños menores de 7 años, explica la especialista, pues algunos nacen con esas estructuras nasales “un poco más aumentadas de lo normal, lo que les genera enfermedades como rinitis alérgica o asma”. Solo después de esa edad, las adenoides se van ajustando a su tamaño según la proporción de su rostro. La hinchazón puede tratarse con cirugías, pero no siempre es necesario.
Hay también pacientes que nacen con condiciones atópicas de base, es decir con alergias asociadas a ese aumento de tamaño.
Condiciones ambientales
No se trata, enfatiza Adriana, de una enfermedad rara, al contrario, se ha convertido en común, dadas las condiciones atmosféricas que incrementan los casos de rinitis alérgica por los cambios en la temperatura y la presencia de más partículas contaminantes que traen infecciones difíciles de atrapar por este tejido.
Entre los síntomas que pueden alertar esta enfermedad están respirar a través de la boca debido a que la nariz está bloqueada, principalmente en la noche; mal aliento, labios cuarteados, resequedad en la boca, rinorrea o congestión nasal persistente, estar inquieto mientras se duerme, roncar, tener episodios de ausencia de la respiración durante el sueño (apnea), e infecciones frecuentes en el oído. Asímismo, la gripe o rinofaringitis viral, faringitis y crup —una infección que inflama la laringe—, son otras dolencias respiratorias que pueden presentar los niños.
Enfermedad en tratamiento
1. ¿Es una opción extraer las adenoides?
Una de las alternativas médicas para atender las adenoides hipertróficas es retirar estos tejidos. “Era casi una regla general que cuando un niño tiene sinusitis, amigdalitis o infecciones respiratorias con frecuencia, lo operaran”. Sin embargo, para la médica Adriana Aguirre, no es la mejor opción, porque cumplen una función de defensa en el sistema respiratorio al producir sustancias inmunológicas también para proteger del medio ambiente. En este caso, “su ausencia solo empeoraría la protección de los pulmones o los cornetes”.
2. Alternativas para mitigar la hinchazón
Existen otras formas de tratar la inflamación de estos tejidos. La principal, dice la especialista, es mediante el autocuidado. Si la persona es consciente de que ante cualquier estímulo respiratorio su cuerpo reacciona porque es alérgica, lo mejor es que evite entrar en contacto con estos estímulos como aromas, humo del cigarrillo, polvo, cambios de temperatura. Otra opción es mantener lavada la nariz con suero fisiológico. Se recomienda acudir al médico para determinar, si es el caso, un tratamiento que puede incluir antibióticos.
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