Los hombres y las mujeres que desean dejar de fumar, hacerse activos y perder peso tienen muchas más probabilidades de lograrlo si su pareja también adopta los mismos hábitos saludables, según una reciente investigación.
Jane Wardle directora del Centro de Investigación sobre Conductas de la Salud del Colegio Universitario de Londres, en Inglaterra, y coautora del estudio, indica que “las parejas casadas o que tienen un compañero más ‘sano’ tienen más probabilidades de cambiar que aquellas cuyo compañero tiene un estilo de vida malsano”.
Se estableció que la mitad de los fumadores de ambos sexos, que participaron en el estudio, dejaron de fumar después de que su cónyuge también dejara este hábito.
De forma similar, alrededor de dos terceras partes de los hombres y las mujeres inactivos comenzaron a ser activos luego de que su cónyuge sedentario iniciara una actividad. Por otra parte, más de una tercera parte de las mujeres perdieron peso junto con su marido.
Wardle explicó que si bien el estudio no se había hecho para responder al por qué de esta situación, la explicación más probable es que «cambiar juntos hace que los cambios sean más fáciles».
A su vez, Samantha Heller, nutricionista clínica principal del Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York, cree que el respaldo y el compañerismo se pueden encontrar fuera de casa. “Tomar una clase, contratar a un entrenador o trabajar con un dietista también son formas de obtener el respaldo que quizá resulte necesario para realizar cambios saludables”.