¿Lejos de casa? Aprende a disfrutar a solas las celebraciones
¿Se aproxima una fecha especial, pero estás lejos de casa y de tus seres queridos? ¡Felicitaciones! Estás a punto de vivir una de las mejores experiencias de la vida: disfrutar a solas y conocerte mejor.
De acuerdo con el DANE, en los últimos 15 años ha aumentado en un 7 % el número de personas que viven solas en el país. Mientras en 2005 el 11 % de los hogares colombianos era unipersonal, en la actualidad la cifra ya llega al 18 %, una realidad que, querámoslo o no, nos lleva a ajustar nuestras actividades y, a menudo, disfrutar a solas las celebraciones.
Por años se nos ha vendido la idea de que estar acompañados es la mejor manera de festejar, pero la sociedad moderna podría considerar esta afirmación una falacia cultural. Hoy en día, no son raras las familias cuyos hijos viven fuera del país; o encontrar ejecutivos que viajan a otras geografías por compromisos laborales y acaban pasando fechas señaladas como cumpleaños, navidades, Año Nuevo y días del padre o de la madre lejos de casa, de la familia y de los amigos, pero cerca de una gran oportunidad: la de conocerse mejor a ellos mismos. De hecho, los expertos aseguran que aprender a disfrutar a solas es de los procesos más importantes del ser humano. Una cierta dosis de soledad en nuestras vidas es necesaria para fortalecer el amor propio, retarnos, reinventarnos y, también, darnos algún que otro gusto.
Seguro te estarás preguntando si vale la pena hacer una fiesta «de mí para mí» ¡Sí! ¡Por supuesto que sí! Si lo hacemos para los demás, ¿no tendría aun mayor sentido hacerlo para la persona más importante de nuestras vidas? Tómate el tiempo de preparar la escena, un poco de decoración, unas velas, quizá quemar incienso —si te gusta—. Prepara o encarga tu comida preferida y, ¡a disfrutar a solas! También puedes subir una foto de tu celebración a tus redes sociales con un mensaje divertido, verás que más de uno te quiere imitar la próxima vez.
El ritual de la soledad
Robin Sharma, en su famosa obra “El monje de vendió su Ferrari”, propone diez rituales de la vida radiante que, practicados de forma constante, pueden llegar a transformar nuestra vida de manera sustancial. Uno de ellos es, precisamente, el ritual de la soledad, especial para disfrutar a solas. Consiste en permanecer en un silencio consciente entre 15 y 50 minutos para lograr, a partir de esa quietud, la conexión con nuestra fuente creativa. Sharma afirma que la práctica de este ritual es capaz de producir energía desbordante.
Ya sea que se elija celebrar festividades lejos de casa por obligación o por decisión propia, lo cierto es que las celebraciones no determinan quiénes somos ni nuestro grado de felicidad, pero sí pueden ser una excelente oportunidad para salir de la zona de confort, conectar con nuestro yo interior y, por qué no, empezar nuevas pasiones que no te atreves a hacer delante de otros.