Tener la dieta justa según las necesidades propias de cada organismo, su demanda específica de nutrientes y su predisposición genética, es a lo que apunta la medicina de precisión desde el área de la genómica nutricional.
Cada organismo procesa de manera diferente los alimentos, tanto en sus cualidades gustativas, olfativas, como en su impacto en el metabolismo y efectos secundarios. Por eso la biotecnología ha puesto sus ojos sobre esta área del conocimiento con el fin de ir evaluando alternativas de alimentación personalizada para diferentes casos en los que esta pueda ser determinante.
Como ha explicado la directora de la Unidad de Investigación en Epidemiología Genética y Molecular de la Universidad de Valencia, Dolores Corella, a la agencia EFE, “la genética determina la ingesta de un alimento concreto porque hay personas genéticamente predispuestas a consumir mayor o menor cantidad”. En el caso de las bebidas alcohólicas, por ejemplo, la experta afirma que hay genes que influyen en la ingesta de alcohol.
La idea a futuro es plantear una nutrición específica de acuerdo con cada perfil genético. Actualmente se evalúan las opciones para frenar problemáticas como la obesidad, enfermedad en la que se han descubierto factores genéticos que afectan por ejemplo la leptina, la hormona implicada en la regulación del peso corporal, por lo que se estudia poder introducir leptina como nutriente para prevenir la obesidad, pues como explica la especialista, “pensamos que la resistencia a la leptina es lo que provoca la mayoría de obesidades y si se administra en el adulto no se reduce el peso porque se ha generado una resistencia”.
Este tipo de desarrollos son los que se esperan potenciar con la medicina personalizada o de precisión de la mano de los avances en la tecnología y la genómica.