Encontrar un grupo de alimentos que además de nutritivo sea del agrado de los pequeños es una tarea que no siempre es fácil para los papás.

Durante la época escolar, los niños viven muchos cambios en su alimentación debido a los nuevos horarios, el aumento de las demanda energéticas y la falta de presencia de los padres para acompañar su dieta directamente.

Uno de los retos más grandes es garantizar una lonchera saludable para los momentos de refrigerio entre las comidas principales. De hecho, muchos de los alimentos que les damos al desayuno por ejemplo, son una buena opción para complementar estos snacks solo que en porciones inferiores.

Aunque dependiendo de las condiciones de cada niño, en cuanto a su género, etapa de crecimiento y estado de salud, sus necesidades nutricionales son diferentes, a rasgos generales un buen refrigerio, según explica la médica nutricionista Patricia Restrepo debería incluir alimentos ricos en fibra y energía.

Mientras una comida principal como el almuerzo cubre aproximadamente el 25% de la demanda nutricional del menor, una media mañana debe cubrir entre el 10 y 15% por lo que en niños con apetencia adecuada o sin ningún problema de sobrepeso podemos incluir frutas, lácteos y proteínas simplemente en porciones más pequeñas.

Tome nota de estas ideas para una lonchera rica y nutritiva:

• 1 manzana cortada en cubito, un paquete de galletas integrales y ricas en fibra, una barrita de queso y un vaso de jugo natural con poca azúcar o agua.
• ½ taza de yogurt o de una bebida láctea, 1 barra de cereal preferiblemente integral, 12 uvas.
• 1 taza de zanahorias con limón, ½ sándwich de pan integral con queso y tomate.
• ½ taza de mango picado, 1 taza de palomitas de maíz naturales y 2 tajadas de jamón.