No todos los productos que dicen evitar las arrugas realmente lo cumplen. Descubre cuáles son los componentes clave que debes buscar en una crema para ver resultados.
Más allá del factor genético, entre el 60 % y el 70 % del envejecimiento de la piel se debe a la exposición solar y a prácticas perjudiciales, entre ellas el bronceado intencional, explica la dermatóloga de la universidad CES, Melisa Mejía.
“Lo que más le sirve a la piel es lo que uno hace todos los días”, indica la especialista, haciendo referencia a una rutina diaria de cuidados que según su consejo debería tener un método de limpieza, un buen protector solar (en lo posible dermatológico y adecuado para el tipo de piel), con un FPS por encima de 50, un producto en la mañana que tenga componentes antioxidantes y otro en la noche dirigido a las necesidades individuales, en este caso a la prevención del envejecimiento, e idealmente un contorno de ojos.
¿Cómo saber qué funciona?
Independiente de la marca de su preferencia, los productos antienvejecimiento incluyen algunos grupos de componentes con funcionalidades específicas. Los primeros son los llamados retinoides, como el retinol, el ácido retinoico o el adapaleno. Otros clave son los alfa hidroxiácidos, entre los que está el ácido glicólico y el ácido salicílico. Estos dos grupos, indica la dermatóloga Mejía, son los únicos con evidencia científica y ensayos con pacientes que han demostrado una disminución en el envejecimiento a largo plazo.
Existen también los antioxidantes, la vitamina C, el ácido ferúlico y el resveratrol, cuyo efecto ha demostrado que sí sirve para las células de la piel contra la radiación y otros agentes externos que la dañan y desgastan. “Por lo general, los retinoides y los alfa hidroxiácidos se utilizan en la noche. Los antioxidantes, como nos cuidan del sol, se utilizan en la mañana”, recomienda la dermatóloga.
¿Qué pasa con el ácido hialurónico?
Es un excelente hidratante cuando se aplica de forma tópica. Sin embargo, la hidratación por sí misma no disminuye las arrugas y debe haber un estímulo secundario de colágeno para que exista una mejoría en ese sentido. “Hay quienes creen que por aplicarse aceites, vaselinas y cremas demasiado hidratantes en la piel están haciendo el efecto de prevenir las arrugas y eso es falso”, acota Mejía.
¿Tiene alguna importancia utilizar sueros?
Lo que ha hecho que los sueros faciales (llamados serums) sean tan populares es que se pueden utilizar en todo tipo de piel. Sin embargo, lo importante son los compuestos que los integran. La elección dependerá de las necesidades de cada piel, es decir, mientras las secas pueden usar sueros tipo ungüentos sin problemas, las que son mixtas a grasas deben utilizar sueros tipo gel, pues usar productos inadecuados produce grasa y brotes de acné.
Ten buenos hábitos
Mantener una dieta equilibrada (el aporte adecuado de nutrientes es muy importante para la piel), beber agua y usar protección solar a diario, son acciones que debe considerar. Dormir poco, el uso de tabaco o el consumo excesivo de licor, son responsables de un envejecimiento prematuro.
Así mismo, es importante que su rutina en lo posible sea prescrita por un dermatólogo, pues personas sin formación médica no están en capacidad para recomendar productos, servicios o procedimientos.
¿Debes tomar colageno?
El cuerpo utiliza esta proteína para su funcionamiento y el mantenimiento de múltiples sistemas, entre ellos cartílagos, huesos y piel. A pesar de que la popularidad de suplementos en polvo, batidos o en cápsulas que prometen regenerar uñas, cabello y piel, hay muy poca evidencia científica que demuestre buenos resultados tras su ingesta. Además, hay que tener cuidado al comprarlos, porque algunos de ellos incluyen otros compuestos que son alergenos para el cuerpo o la piel; y contienen azúcar añadida para dar sabor.